Evangelio del día | 27 de Abril | 3ra. Semana de Pascua
EVANGELIO DEL DÍA
Lunes 27 de abril de 2020
3ra. Semana de Pascua / Ciclo A
La obra que Dios quiere es que creamos en el Enviado, en su Hijo Jesucristo. Creer en Jesús no es cosa de ideas ni de discursos, ni siquiera de un momento esporádico de nuestra vida. Creer en Cristo es una forma de vida y hacerlo vida en nosotros. El cristiano, sea cual sea su estado de vida, debe hacer visible a Cristo presente en cada ser humano. Hoy deberíamos no sólo volver a recapacitar en nosotros cuál es nuestra conducta ante Dios y los hermanos, si son reflejo de bondad o por el contrario son reflejo del individualismo al que la sociedad nos invita.
EVANGELIO
Trabajad no por el alimento que perece,
sino por el alimento que perdura para la vida eterna.
Del santo evangelio según san Juan 6, 22-29
Después de que Jesús hubo saciado a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el mar. Al día siguiente, la gente que se había quedado al otro lado del mar notó que allí no había habido más que una barca y que Jesús no había embarcado con sus discípulos, sino que sus discípulos se habían marchado solos.
Entretanto, unas barcas de Tiberíades llegaron cerca del sitio donde habían comido el pan después que el Señor había dado gracias. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús.
Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron:
«Maestro, ¿cuándo has venido aquí?».
Jesús les contestó:
«En verdad, en verdad os digo: me buscáis no porque habéis visto signos, sino porque comisteis pan hasta saciaros. Trabajad no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura para la vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre; pues a este lo ha sellado el Padre, Dios».
Ellos le preguntaron:
«Y, ¿qué tenemos que hacer para realizar las obras de Dios?».
Respondió Jesús:
«La obra de Dios es esta: que creáis en el que él ha enviado».
Palabra del Señor. Gloria y honor a ti Señor.
Para la reflexión personal
- La gente tenía hambre, comió el pan y buscó más pan. Buscó el milagro y no la señal de Dios que en el milagro se escondía. ¿Qué es lo que más busco en mi vida: el milagro o la señal?
- Por un momento, haz silencio dentro de ti y pregúntate: “Creer en Jesús: ¿qué significa esto para mí, bien concretamente en mi vida de cada día?”
Oración
¡Oh Dios, que muestras la luz de tu verdad a los que andan extraviados, para que puedan volver al buen camino!; concede a todos los cristianos rechazar lo que es indigno de este nombre y cumplir cuanto en él se significa.