La Exaltación de la Santa Cruz | Lecturas 14 de septiembre – Fiesta | Año Par
LA CRUZ, LUGAR DE AMOR Y PROFECÍA
La Exaltación de la Santa Cruz
Lecturas lunes 14 de septiembre de 2020
Fiesta de La Exaltación de la Santa Cruz.
Vigésima cuarta semana / Tiempo Ordinario
Año Par
PRIMERA LECTURA
Cristo se humilló a si mismo,
por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas
De la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses 2, 6-11
Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el «Nombre-sobre-todo-nombre»; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.
Palabra de Dios. Te alabamos Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Salmo 77, 1-2. 34-35. 36-37. 38
R/. No olvidéis las acciones del Señor
Escucha, pueblo mío, mi enseñanza, inclina el oído a las palabras de mi boca: que voy a abrir mi boca a las sentencias, para que broten los enigmas del pasado. R/.
Cuando los hacía morir, lo buscaban, y madrugaban para volverse hacia Dios; se acordaban de que Dios era su roca, el Dios Altísimo su redentor. R/.
Lo adulaban con sus bocas, pero sus lenguas mentían: su corazón no era sincero con él, ni eran fieles a su alianza. R/.
Él, en cambio, sentía lástima, perdonaba la culpa y no los destruía: una y otra vez reprimió su cólera, y no despertaba todo su furor. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
R/ Alelulya, aleluya
Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos, porque con tu santa cruz redimiste al mundo. R/.
EVANGELIO
El Hijo del hombre tiene que ser levantado.
Del santo evangelio según san Juan 3, 13-17
En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo: «Nadie ha subido al cielo, sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre. Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna. Tanto amó Dios al mundo que entregó a su Hijo único para que no perezca ninguno de los que creen en él, sino que tengan vida eterna. Porque Dios no mandó su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.»
Palabra del Señor. Gloria a ti Señor.