Lecturas del día | 18 de Julio | 15º Semana – Tiempo Ordinario
DISCRECIÓN Y HUMILDAD EN NUESTRO ACTUAR
Lecturas sábado 18 de julio
Lecturas sábado 18 de julio de 2020
Décima quinta semana / Tiempo Ordinario
Ciclo A
PRIMERA LECTURA
Codician los campos y usurpan las casas.
Del libro del profeta Miqueas 2, 1-5
¡Ay de aquellos que planean injusticias, que traman el mal durante la noche y al despuntar la mañana, lo ejecutan, porque son gente poderosa!
Codician los campos y los roban, codician las casas y las usurpan, violando todos los derechos arruinan al hombre y lo despojan de su herencia. Por eso dice el Señor: «Estoy planeando contra esta gente una serie de calamidades de las que no podrán escapar. Entonces ya no caminarán con altivez, porque será un tiempo de desgracias.
Aquel día, la gente se burlará de ellos y les cantará un triste canto: Nos han despojado de todo y se han repartido nuestras tierras; se han apoderado de nuestra herencia y no hay quien nos la devuelva».
Por eso dice el Señor: «Cuando la asamblea del pueblo distribuya nuevamente las tierras, no habrá parte para ellos».
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 9, 22-23. 24-25. 28-29. 35.
R/. Señor, no te olvides de los pobres.
¿Por qué te quedas lejos, Señor, y te escondes en el momento de la angustia? La soberbia del malvado oprime al pobre. ¡Que se enrede en las intrigas que ha tramado! R/.
El malvado presume de su ambición y el avaro maldice al Señor. El malvado dice con insolencia que no hay Dios que le pida cuentas. R/.
Su boca está llena de engaños y fraudes, su lengua esconde maldad y opresión; se agazapa junto a la casa del inocente para matarlo a escondidas. R/.
Pero tú, Señor, ves las penas y los trabajos, tú los miras y los tomas en tus manos; el pobre se encomienda a ti, tú eres el socorro del huérfano. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2 Co 5, 19
R/. Aleluya, aleluya.
Dios reconcilió al mundo consigo por medio de Cristo, y a nosotros nos confió el mensaje de la reconciliación. R/
EVANGELIO
Les mandó que no lo publicaran, para que
se cumplieran las palabras del profeta.
Del santo Evangelio según san Mateo 12, 14-21
En aquel tiempo, los fariseos se confabularon contra Jesús para acabar con él. Al saberlo, Jesús se retiró de ahí. Muchos lo siguieron y él curó a todos los enfermos y les mandó enérgicamente que no lo publicaran, para que se cumplieran las palabras del profeta Isaías:
Miren a mi siervo, a quien sostengo; a mi elegido, en quien tengo mis complacencias. En él he puesto mi Espíritu, para que haga brillar la justicia sobre las naciones. No gritará ni clamará, no hará oír su voz en las plazas, no romperá la caña resquebrajada, ni apagará la mecha que aún humea, hasta que haga triunfar la justicia sobre la tierra; y en él pondrán todas las naciones su esperanza.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.