Reflexión al Evangelio | 10 de Julio | 14º Semana – Tiempo Ordinario
ENVIADOS SIN SEGURIDAD
Reflexión al Evangelio viernes 10
Reflexión al Evangelio viernes 10 de julio de 2020
Décima cuarta semana / Tiempo Ordinario
Ciclo A
El verdadero discipulado consiste no tanto en esa prontitud primera con que uno deja todo para seguir a Cristo –que también–, sino, sobre todo, en esa fidelidad que uno alimenta cada día hasta llegar a estar dispuesto a pasar de un paisaje a otro por amor de lo invisible. Lo que Jesús dice de sus apóstoles misioneros se aplica también a todos los que les siguen: tienen que vivir con inseguridad. Serán contradichos, ridiculizados, quizás perseguidos. El evangelio, que se supone debe unir y llevar paz, en realidad frecuentemente divide, y lleva guerra. Trae división incluso entre aquellos que aclaman a Cristo como a su Señor. Jesús prometió a sus discípulos –de entonces y de ahora– su Espíritu Santo, para que esté a su lado en las pruebas y tribulaciones. El discípulo debe poner todas sus artes –desde la astucia de la serpiente hasta la sencillez de la paloma– en no perder de vista a Jesucristo y, en él, al Padre.
Solo quien mira al crucificado podrá, llegado el caso, asumir la cruz. Solo quien escucha al Hijo encomendando al Padre su último aliento, podrá entregarse en el momento de la prueba con ese mismo Espíritu. El Señor será entonces para él como un ciprés frondoso que da sombra y fruto: la sombra de la paz, el fruto de la vida. (CMF)
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 16, 13; 14, 26
R/. Aleluya, aleluya.
Cuando venga el Espíritu de verdad, él les enseñará toda la verdad y les recordará todo cuanto yo les he dicho, dice el Señor. R/.
EVANGELIO
No serán ustedes los que hablarán,
sino el Espíritu de su Padre.
Del santo Evangelio según san Mateo 10, 16-23
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus apóstoles: «Yo los envío como ovejas entre lobos. Sean, pues, precavidos como las serpientes y sencillos como las palomas.
Cuídense de la gente, porque los llevarán a los tribunales, los azotarán en las sinagogas, los llevarán ante gobernadores y reyes por mi causa; así darán testimonio de mí ante ellos y ante los paganos. Pero, cuando los enjuicien, no se preocupen por lo que van a decir o por la forma de decirlo, porque en ese momento se les inspirará lo que han de decir. Pues no serán ustedes los que hablen, sino el Espíritu de su Padre el que hablará por ustedes.
El hermano entregará a su hermano a la muerte, y el padre a su hijo; los hijos se levantarán contra sus padres y los matarán; todos los odiarán a ustedes por mi causa, pero el que persevere hasta el fin, se salvará.
Cuando los persigan en una ciudad, huyan a otra. Yo les aseguro que no alcanzarán a recorrer todas las ciudades de Israel, antes de que venga el Hijo del hombre».
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Para la reflexión personal
- ¿Con frecuencia sentimos que nuestra fe es puesta a prueba en la confusión de nuestro tiempo?
- ¿A quien acudimos en momentos de confusión o duda?
- ¿Me considero un verdadero discípulo de Cristo?
- ¿Mis criterios y valores de mi vida, se regulan por el Evangelio y el Espíritu Santo ?
Oración
Te pedimos que el Espíritu Santo hable en nosotros cuando encontremos contradicciones a causa del evangelio de tu Hijo. Qué él sea nuestra fortaleza y nuestra paz cuando tenemos que vivir con nuestras incertidumbres e inseguridades que son parte y herencia de los que creemos en ti.