Reflexión al Evangelio | 11 de septiembre | 23º Semana – Tiempo Ordinario – Año Par

LA FORMACIÓN DEL DISCÍPULO
Reflexión Evangelio 11 de septiembre

Reflexión al Evangelio
Viernes 11 de septiembre de 2020
Vigésima tercera semana / Tiempo Ordinario
Año Par

Introducción

La formación del discípulo quiere decir que: adoptará las mismas actitudes y comportamientos de su Maestro Jesús y será formador de otros discípulos. Cuando Jesús utiliza la imagen del “ciego” pretende indicar un estado de aprendizaje; está queriendo decir que, hasta que no haya sido iluminado a fondo por los criterios de vida que inculca el Maestro, será como un ciego que necesita del apoyo de otros. Por esta razón, quien comienza a caminar en el seguimiento de Jesús debe evitar la precipitación a la hora de calificar la conducta de los demás. Esto tiende a suceder sobre todo en el recién convertido que, desde la radicalidad de su opción, nota con mayor facilidad las deficiencias de los otros y entonces comienza a dar opiniones sobre todo y sobre todos, llegando a herir –en ocasiones- la caridad.

Porque el discípulo, a pesar de su camino con Jesús, debe considerarse todavía a sí mismo como un ciego, no debe emitir juicios sobre los demás, ya que a él mismo todavía le falta mucho trecho en el camino de la conversión. El discipulado exige el respeto de esta ética. La primera tarea del discípulo es seguir trabajándose a sí mismo: discernir y sacar la “viga del propio ojo” (6,41-42). La segunda tarea es “guiar” a otros, es todavía más exigente. Si ya es difícil trabajarse a sí mismo, cuánto más el hacerlo con los demás. Este es un nuevo aspecto del ministerio del amor que no puede ser descuidado.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr Jn 17, 17
R/. Aleluya, aleluya.
Tu palabra, Señor, es la verdad; santifícanos en la verdad. R/.

EVANGELIO

¿Puede un ciego guiar a otro ciego?
Del santo Evangelio según san Lucas 6, 39-42

En aquel tiempo, Jesús propuso a sus discípulos este ejemplo: «¿Puede acaso un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en un hoyo? El discípulo no es superior a su maestro; pero cuando termine su aprendizaje, será como su maestro.

¿Por qué ves la paja en el ojo de tu hermano y no la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo te atreves a decirle a tu hermano: ‘Déjame quitarte la paja que llevas en el ojo’, si no adviertes la viga que llevas en el tuyo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga que llevas en tu ojo y entonces podrás ver, para sacar la paja del ojo de tu hermano». 
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Para la reflexión personal

• Hagamos hoy un poco de examen de conciencia: ¿no tendemos a ignorar nuestros defectos, mientras que estamos siempre alerta para descubrir los ajenos?
• Brizna o viga en el ojo. ¿Cómo me relaciono con los demás en casa y en familia, en el trabajo con los colegas, en la comunidad con los hermanos y hermanas?

Oración

Señor, con la meridiana luz de tu sabiduría disipa las tinieblas nocturnas de nuestra mente, para que, iluminada, te sirva en la renovación de nuestra vida purificada. Amén.