Reflexión al Evangelio | 17 de agosto | 20º Semana – Tiempo Ordinario
VIDA EN PLENITUD
Reflexión Evangelio 17 de agosto
Reflexión al Evangelio lunes 17 de agosto de 2020
Vigésima semana / Tiempo Ordinario
Ciclo A
Introducción
Algunos piensan que es mejor apagar este impulso —el impulso de vivir— porque es peligroso. Quisiera decir, especialmente a los jóvenes: nuestro peor enemigo no son los problemas concretos, por serios y dramáticos que sean: el peligro más grande de la vida es un mal espíritu de adaptación que no es mansedumbre o humildad, sino mediocridad, algo pusilánime. ¿Un joven mediocre es un joven con futuro o no? ¡No! Permanece allí, no crece, no tendrá éxito. ¿Quién, pudiendo elegir entre un original y una copia, elegiría la copia? Este es el desafío: encontrar el original de la vida, no la copia. ¡Jesús no ofrece sustitutos, sino vida verdadera, amor verdadero, riqueza verdadera!
¿Cómo podrán los jóvenes seguirnos en la fe si no nos ven elegir el original, si nos ven adictos a las medias tintas? Es feo encontrar cristianos de medias tintas, cristianos —me permito la palabra— «enanos»; crecen hasta una cierta estatura y después no; cristianos con el corazón encogido, cerrado. Es feo encontrar esto. Es necesario el ejemplo de alguno que me invita a un «más allá», a un «más», a crecer un poco. (Catequesis del Papa Francisco)
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 5, 3
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos. R/.
EVANGELIO
Si quieres ser perfecto, vende lo que tienes
y tendrás un tesoro en el cielo.
Del santo evangelio según san Mateo 19, 16-22
En aquel tiempo, se acercó a Jesús un Joven y le preguntó: «Maestro, ¿qué cosas buenas tengo que hacer para conseguir la vida eterna?». Le respondió Jesús: «¿Por qué me preguntas a mí acerca de lo bueno? Uno solo es el bueno: Dios. Pero, si quieres entrar en la vida, cumple los mandamientos».
Él replicó: «¿Cuáles?». Jesús le dijo: No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre, ama a tu prójimo como a ti mismo.
Le dijo entonces el joven: «Todo eso lo he cumplido desde mi niñez, ¿qué más me falta?». Jesús le dijo: «Si quieres ser perfecto, ve a vender todo lo que tienes, dales el dinero a los pobres, y tendrás un tesoro en el cielo; luego ven y sígueme». Al oír estas palabras, el joven se fue entristecido, porque era muy rico.
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Para la reflexión personal
Una persona que vive preocupada con su riqueza o con la adquisición de los bienes que la propaganda del consumismo le ofrece, ¿puede liberarse de todo esto para seguir a Jesús y vivir en paz en una comunidad cristiana? ¿Es posible? ¿Qué piensas?
Oración
Padre amado, estamos deseosos de seguir a tu Hijo a dondequiera nos lleve,
pero no, si tenemos que renunciar a nuestros pequeños o grandes apegos
a cosas o a personas. Danos la mentalidad de tu propio Hijo y su Espíritu de valor y entrega, para que con Jesús no temamos las consecuencias de entregarnos a tu pueblo y a ti. Sé tú nuestro único Dios y nuestro todo en la vida. Amén.