Reflexión Evangelio 11 de Enero | Inicio del Tiempo Ordinario – Año Impar

LAS TRES TAREAS
Reflexión Evangelio 11 de Enero

Reflexión Evangelio 11 de Enero de 2021
Incido del Tiempo Ordinario – Año Impar

Reflexión

Después de la Navidad comienza un nuevo tiempo litúrgico, el tiempo ordinario: pero en el centro de la vida cristiana está siempre Jesús, la primera y la última Palabra del Padre, el Señor del universo, el Salvador del mundo. No hay otro, es el único. Ese es el centro de nuestra vida: Jesucristo. (…) Y aquí la pregunta: ¿el centro de mi vida es Jesucristo? ¿Cuál es mi relación con Jesucristo? Hay tres tareas para asegurarnos de que Jesús está en el centro de nuestra vida.

La primera tarea es conocer a Jesús para reconocerlo. En su tiempo, muchos no lo reconocieron: los doctores de la ley, los sumos sacerdotes, los escribas, los saduceos, algunos fariseos. Es más, lo persiguieron, lo mataron. Hay que preguntarse: ¿A mí me interesa conocer a Jesús? ¿O quizá me interesa más la telenovela o los chismorreos o las ambiciones o conocer la vida de los demás?

Para conocer a Jesús está la oración, el Espíritu Santo, pero también está el Evangelio, que es para llevarlo siempre encima para leer un pasaje todos los días. Es el único modo de conocer a Jesús. Luego es el Espíritu Santo quien hace el trabajo. Esta es la semilla. Quien hace germinar y crecer la semilla es el Espíritu Santo.

La segunda tarea es adorar a Jesús. No solo pedirle cosas y darle gracias. Hay dos modos de adorar a Jesús: la oración de adoración en silencio y luego quitar de nuestro corazón las otras cosas que adoramos, que nos interesan más. No, solo Dios. Las otras cosas sirven si soy capaz de adorar solo a Dios. Hay una pequeña oración que rezamos, el Gloria: Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, pero muchas veces la decimos como papagayos. ¡Y esa oración es adoración! Gloria: adoro al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.

Adorar, con pequeñas oraciones, con el silencio ante la grandeza de Dios, adorar a Jesús y decir: ‘Tú eres el único, tú eres el principio y el fin y contigo quiero estar toda la vida, toda la eternidad. Tú eres el único’. Y eliminar las cosas que me impiden adorar a Jesús.

La tercera tarea es seguir a Jesús, como dice el Evangelio de hoy cuando, Jesús llama a los primeros discípulos. Significa poner a Jesús en el centro de nuestra vida: Es simple la vida cristiana, es muy sencilla, pero necesitamos la gracia del Espíritu Santo para que despierte en nosotros esas ganas de conocer a Jesús, de adorar a Jesús y de seguir a Jesús.

Y por eso hemos pedido al comienzo, en la oración Colecta al Señor que conozcamos qué debemos hacer, y tener la fuerza de hacerlo. Que en la sencillez de cada día —porque, cada día, para ser cristianos no son necesarias cosas raras, cosas difíciles, cosas superfluas; no, es sencillo— el Señor nos dé la gracia de conocer a Jesús, de adorar a Jesús y de seguir a Jesús. (SS Papa Francisco. Misa en Santa Marta. Lunes 09 de enero del 2017.)


ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mc 1. 15
R/. Aleluya, aleluya.

El Reino de Dios está cerca, dice el Señor. Conviértanse y crean en el Evangelio. R/.

EVANGELIO

Marcos 1, 14-20
Arrepiéntanse y crean en el Evangelio.

Lectura del santo Evangelio según san Marcos

Después de que arrestaron a Juan el Bautista, Jesús se fue a Galilea para predicar el Evangelio de Dios y decía: «Se ha cumplido el tiempo y el Reino de Dios ya está cerca. Conviértanse y crean en el Evangelio».

Caminaba Jesús por la orilla del lago de Galilea, cuando vio a Simón y a su hermano, Andrés, echando las redes en el lago, pues eran pescadores. Jesús les dijo: «Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres». Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.

Un poco más adelante, vio a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en una barca, remendando sus redes. Los llamó, y ellos, dejando en la barca a su padre con los trabajadores, se fueron con Jesús. 
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Fray Nelson Medina, O.P.
Reflexión Evangelio 11 de Enero
El arrepentimiento va unido a la fe
El arrepentimiento sin la fe conduce a la desesperación y la fe sin arrepentimiento lleva a una idea vacía, a una mentira, a un engaño.
Para la reflexión personal
  • Jesús y su Evangelio, ¿son Buena Noticia para nosotros hoy? ¿Aceptamos el Evangelio como palabras y acción de Dios, dirigidas personalmente a nosotros hoy?
  • He pensado alguna vez ¿Cómo es mi respuesta a la llamada de Jesús? ¿Cómo activo ese entusiasmo por la misión a la que he sido llamado?
Oración

Señor, danos un corazón agradecido, para comprender todo el bien que constantemente recibimos de ti e intuir en el sufrimiento el camino de la gracia que tú nos has abierto y recorres con nosotros. Danos un corazón vigilante, para rechazar el entorpecimiento de la indiferencia y las insidias del mal, y acoger tu novedad en nuestra vida. Danos un corazón compasivo, capaz de hacerse cargo contigo de las penas de los otros. Amén.

Lecturas lunes 11 de enero. Inicio del Tiempo Ordinario

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