Reflexión Evangelio 12 de noviembre | San Josafat, Obispo y Mártir – Memoria
PERMANECER EN EL REINO DE DIOS
Reflexión Evangelio 12 de noviembre
San Josafat, Obispo y Mártir – Memoria
Reflexión Evangelio jueves 12 de noviembre de 2020
Trigésima segunda semana / Tiempo Ordinario
Año Par
Introducción
¡Conviértete de todo corazón a Dios, olvida el mundo y tu alma encontrará el reposo! Ea, pues, alma fiel prepara tu corazón a este Esposo para que quiera venirse a ti, y hablar contigo.(…) Da, pues, lugar a Cristo, y a todo lo demás cierra la puerta. Si a Cristo tuvieres estarás rico, y te bastará. Él será tu fiel procurador, y te proveerá de todo, de manera que no tendrás necesidad de esperar en los hombres. Porque los hombres se mudan fácilmente, y desfallecen en breve; pero «Jesucristo permanece para siempre» (Jn 12,34), y está firme hasta el fin. ¡Aprende, ante todo, a recogerte en tu interior y verás que el reino de Dios viene a ti! Porque el reino de Dios es “paz y gozo en el Espíritu Santo” (Rm 14,17).
Esta alegría no se da a los hombres sin fe. Cristo viene a ti y te hará experimentar su consuelo si le has preparado dentro de ti una morada digna de él. Le gusta habitar en el interior. Al hombre interior, Dios le concede frecuentes visitas, conversaciones y consuelos, una gran paz y una familiaridad que confunde. Ea, pues, ¡prepárate para que se digne habitar en tu interior! Porque “el que me ama, se mantendrá fiel a mis palabras. Mi Padre lo amará, y mi Padre y yo vendremos a él y haremos morada en él.” (Jn 14,23).
No hay que poner mucha confianza en el hombre frágil y mortal aunque sea útil y bien querido, ni has de tomar mucha pena si alguna vez fuere contrario o no te atiende. Los que hoy son contigo, mañana te pueden contradecir, y al contrario; porque muchas veces se vuelven como el viento. Pon en Dios toda tu esperanza, y sea Él tu temor y tu amor. Él responderá por ti, y lo hará bien, como mejor convenga. (Tomás de Kempis Imitación de Jesucristo, Libro II, c. 1, 2-3)
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 15, 5
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy la vid y ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante. R/.
EVANGELIO
San Lucas 17, 20-25
El Reino de Dios ya está entre ustedes.
Lectura del santo Evangelio según san Lucas
En aquel tiempo, los fariseos le preguntaron a Jesús: «¿Cuándo llegará el Reino de Dios?». Jesús les respondió: «El Reino de Dios no llega aparatosamente. No se podrá decir: ‘Está aquí’ o ‘Está allá’, porque el Reino de Dios ya está entre ustedes».
Les dijo entonces a sus discípulos: «Llegará un tiempo en que ustedes desearán disfrutar siquiera un solo día de la presencia del Hijo del hombre y no podrán.
Entonces les dirán: ‘Está aquí’ o ‘Está allá’, pero no vayan corriendo a ver, pues así como el fulgor del relámpago brilla de un extremo a otro del cielo, así será la venida del Hijo del hombre en su día. Pero antes tiene que padecer mucho y ser rechazado por los hombres de esta generación».
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Para la reflexión personal
- ¿Qué aporto para los signos del Reino se hagan presente en mi metro cuadrado? ¿Descubro en medio de nosotros la presencia oculta del Reino de Dios?
- ¿Buscamos con anhelo e insistencia el don de la sabiduría par hacer digno y sobrenatural nuestro humilde trabajo?
Oración
Dios todopoderoso, tu reino no es un orden establecido y anquilosado, sino algo que está siempre vivo, dinámico y siempre llegando. Haznos conscientes de que encontraremos el reino allí donde te dejemos reinar a ti, donde nosotros y el reino de este mundo demos paso a tu reino, donde dejemos que tu justicia, amor y paz ocupen el lugar de nuestras torpezas y desaciertos. Señor, establece tu reino entre nosotros. Amén.